Cuando se decide comprar un coche hay personas que no saben que decisión es mejor, si comprar un vehículo nuevo o uno de segunda mano. Es por ello que es importante conocer y saber que implica cada compra y como proceder en cada caso.
COMPRAR UN COCHE NUEVO
Antes de comprar un coche nuevo, conviene saber que el precio de un mismo modelo puede variar dependiendo del concesionario, si en el pago del nuevo vehículo ofrecemos además nuestro coche usado, la diferencia puede ser aún mayor.
Trámites a realizar y documentación necesaria
Si a la hora de acudir al concesionario este no dispone del vehículo que queremos adquirir, debemos rellenar un documento llamado hoja de pedido, por norma general viene redactada por el propio fabricante. En este caso nos debemos asegurar:
– De no firmar nunca esta hoja de pedido en blanco.
– De que el precio acordado sea fijo y de manera definitiva, es decir, que el precio fijado no variará durante el periodo en el cual debemos esperar.
– De que le señal que se entrega a cuenta del precio figure en la solicitud.
– Deben aparecer todas las características del coche elegido y la fecha en la que el vendedor va a entregar el vehículo. No se deben aceptar cláusulas en las que el vendedor pueda variar estas condiciones de manera arbitraria.
Si se entrega un vehículo usado como parte del precio del nuevo vehículo, se debe exigir una copia del contrato de venta ya que se debe notificar a la Jefatura Provincial de Tráfico y al Ayuntamiento, el cambio de titularidad del vehículo ya que si no se realiza esta notificación la persona será obligada a pagar el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica y de las posibles multas de tráfico.
Cuando se haga entrega del nuevo vehículo, el concesionario debe facilitar al comprador la siguiente documentación:
- Permiso de circulación del vehículo.
- Tarjeta de Inspección Técnica.
- Manual de instrucciones y de mantenimiento.
- Garantía del vehículo de manera escrita.
- Factura de compra del vehículo.
Además la persona que adquiera un vehículo nuevo, deberá contratar el seguro obligatorio y deberá abonar en el Ayuntamiento correspondiente el Impuesto de Circulación.
COMPRAR UN COCHE DE SEGUNDA MANO
Cuando se adquiere un vehículo de segunda mano se debe cambiar la titularidad del mismo ante la Jefatura Provincial de Tráfico que corresponda, para lo que el vendedor deberá facilitar la siguiente documentación al comprador:
- El permiso de circulación firmado en el dorso y la ficha de características técnicas.
- Los recibos del pago del Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica.
- El certificado de haber superado la Inspección Técnica de Vehículos (ITV), en el caso de que el coche tuviera más de 4 años de antigüedad.
Se debe rellenar el impreso de notificación de transferencia de vehículos que deben firmar ambos, así como el formulario de transferencia que se debe presentar en Tráfico junto con toda la documentación anterior. Si el coche de segunda mano se adquiere a una empresa de compraventa de coches usados, será la empresa la que se deba encargar de dicho trámite ante Tráfico, aunque es muy importante asegurarse de que la empresa realiza esta gestión.
Si alguna de las dos partes implicadas en la compra – venta del vehículo no se encuentra presente a la hora de presentar la solicitud de transferencia, será necesario acompañar esta solicitud con un acta notarial o certificado en el cual se reconozca la autenticidad de la firma que aparece en el impreso. Cuando se hayan abonado el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y la tasa que corresponda, la Jefatura Provincial de Tráfico expedirá y remitirá el nuevo permiso de circulación al comprador quien a partir de ese momento, figurará como nuevo titular del vehículo.
VEHÍCULO DE SEGUNDA MANO: LA GARANTÍA Y TRASPASO DE LA PÓLIZA DEL SEGURO
El vendedor estará obligado a responder por aquellos desperfectos que presente el vehículo y que no fuesen apreciables por el comprador a simple vista. En las compraventas que se realizan entre particulares, el comprador puede renunciar a esta garantía mientras que si el vendedor es un concesionario, éste estará obligado a responder por los posibles desperfectos que presente el vehículo de segunda mano después de ser adquirido.
En cuanto al traspaso de la póliza del seguro, el comprador puede subrogarse en la póliza de seguro que tenga el vehículo que está adquiriendo, es decir, reemplazar al titular del mismo. En este caso el vendedor debe facilitar al comprador las condiciones de la póliza e informar a la compañía aseguradora de la transmisión del vehículo, además de proporcionar a la compañía los datos del nuevo propietario.
Para ello, el vendedor dispone de 15 días desde que se notifique la venta o transmisión del vehículo de segunda mano a la Jefatura de Tráfico. Una vez se haya notificado esta transmisión, el vendedor puede rescindir el seguro y la compañía aseguradora le devolverá al vendedor parte del precio del seguro que reste hasta el vencimiento de la póliza. Al realizar este traspaso, el comprador deberá asegurarse de que el vendedor se encuentra al corriente del pago de todas las primas, en caso contrario después de la transmisión del vehículo, la aseguradora podrá reclamar al comprador las cantidades pendientes de pago.
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