Reclamación judicial por impago

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Antes de llegar al pleito por una reclamación judicial, por impago, se tienen que haber agotado todas las vías posibles. Este procedimiento se llama “monitorio” y su objetivo es recibir el dinero que te deben tanto si eres una empresa como si eres un particular.

El procedimiento monitorio es una vía rápida y eficaz, es un procedimiento judicial creado por la Ley de Enjuiciamiento Civil (LEC) 1/2000 para realizar reclamaciones de deudas sin establecer un límite de cuantía, y que aporta un alto porcentaje de éxito en el cobro.

No hay un límite de cantidad a reclamar, además la deuda que se quiera reclamar mediante un juicio monitorio debe ser una deuda dineraria, líquida, determinada, vencida y exigible.

Una deuda dineraria, como su nombre indicia, establece que el objeto de la reclamación ha de ser en sí mismo dinerario. La deuda debe venir determinada en moneda legal, ya sea nacional o extranjera.

Deuda determinada, o lo que es lo mismo, deuda líquida que está definida como una suma de dinero concreto.

También debe ser una deuda vencida, que su plazo haya expirado y exigible, o que no dependa de una contraprestación o condición.

Para continuar con el procedimiento, toda documentación relacionada con la deuda es útil (albaranes, cartas, e-mails, mensajes, contratos, etc.) y se debe aportar para documentar la deuda y la relación existente entre las partes.

La solicitud inicial se presenta en el juzgado de Primera Instancia más cercana al domicilio del deudor, y el organismo se pondrá en contacto con él estableciendo un tiempo límite de respuesta. Si su deuda supera los 2.000€ necesita un abogado y procurador, desde Estudio Jurídico Bretón simplificamos este procedimiento largo para que sólo tenga que encargarse de recibir su deuda.

Desde nuestro despacho de abogados en Madrid le informamos del desenlace del proceso, ya que pueden ocurrir varias finales: que el deudor pague y finalice el proceso, que el deudor no responda, es decir, acepta las condiciones y debe pagar, o que se oponga y haya que acudir a la vía judicial.

Sea cual sea el resultado, hacemos un seguimiento y estamos en continuo contacto con el cliente para comunicarle los pasos que debe seguir y alcanzar el objetivo de cobrar el dinero pendiente.